Ante el cierre de tiendas VH, el gobernador Eduardo Bours Castelo aclaró que no se trata de un problema financiero, sino jurídico entre los dos socios propietarios.Señaló que durante dos años el gobierno fue intermediario, pero tuvieron que dejar las pláticas porque no había acuerdo.Indicó que los empleos que se pierdan le preocupan, pero confía en que el personal será recontratado, ya que hay tres empresas buscando ocupar los espacios que dejaran sus sucursales.